Este concierto nos transporta en una alfombra mágica invisible a esos lugares lejanos donde los genios surgen de las lámparas, los pájaros hablan, las águilas llevan en sus garras a los héroes y los barcos navegan por mares de tempestades… Sí, este concierto nos traslada a Oriente, a ciudades con mezquitas de cúpulas en forma de cebolla y calles repletas de gentes con turbante y velos… En esos lugares lejanos, cuando se pone el sol y se encienden las hogueras, las gentes se entretienen en contar cuentos e historias.
Colocada en los atriles de la Camerata Da Vinci está la obra musical más famosa ambientada en Oriente de todas cuantas se han escrito. El compositor, el ruso Rimsky-Korsakov tituló este poema sinfónico “Sheherezade”, el nombre de la heroína de un gran libro en el que se recopilan todos los cuentos orientales que, a lo largo de los siglos, se han transmitido de generación en generación. Se trata de “Las Mil y una Noches”, el libro de los cuentos, los viajes y la magia… es, como ningún otro, el libro de la fantasía, que cobra vida en este concierto a través de la música.
LAS MIL Y UNA NOCHES
Música de Nicolai Rimsky-Korsakov
«Sheherezade» Op.35
Texto de Martín Llade
CAMERATA DA VINCI
MARTÍN LLADE & Clara corrales
Ferdinando Trematore, violín
Martina Alonso, violín
Noelia Gomez, viola
Stamen Nikolov, violonchelo
Francisco Javier Martín, contrabajo
Eduardo Raimundo, clarinete
Rodrigo Martínez, percusión
Angela Trematore, piano
Martín Llade & Clara Corrales, narración
Martín Llade y Clara Corrales forman un dúo de referencia en la divulgación musical en España. Ambos son voces reconocidas de Radio Clásica (RNE), donde comparten micrófono en el programa Sinfonía de la mañana. Martín Llade, periodista, escritor y locutor premiado con el Premio Ondas 2016 al «mejor presentador de radio hablada», ha sido también la voz de RTVE en el Concierto de Año Nuevo de Viena y autor de varias obras que entrelazan historia, ficción y música. Clara Corrales, músico y periodista, aporta una mirada fresca y sensible que enriquece la narración musical, uniendo rigor y cercanía en cada intervención. Juntos, trasladan al escenario la misma complicidad y pasión que transmiten en la radio: la convicción de que la música no solo se escucha, sino que también se comparte y se cuenta.












